Estoy trabajando en unos escritos acerca
de la actitud hacia las enfermedades, y como cambiando nuestra actitud podemos
influir en el tratamiento de las mismas. Esencial en este proceso es el aceptar
la enfermedad. Pero escribiendo al respecto, me he dado cuenta de que la
aceptación es un proceso primordial para determinar cómo vivimos.
El verbo aceptar es definido por la Real Academia Española como
"Recibir voluntariamente o sin oposición lo que se da, ofrece o encarga".
La vida cada día nos ofrece múltiple situaciones, retos y oportunidades. Sin
embargo nosotros muchas veces nos oponemos a estas situaciones y nos negamos a
recibirlas. Creemos que es nuestra responsabilidad cambiarlas. Creamos así una
resistencia que nos deja exhaustos y nos arrebata el gozo. Afrontamos la vida
como una lucha, donde cada día se convierte en una batalla contra las
situaciones que nos afectan. Nos empeñamos en cambiar las situaciones y las
personas, en lugar de hacer el cambio en donde realmente importa, que es en
nuestro interior.
Aceptar lo que sucede en
tu vida, sea bueno o malo, es el primer paso para ser feliz. Aceptar no
significa resignarse. Aceptar es tener conciencia de cómo nos afecta lo que
sucede alrededor de nosotros, y tomar una decisión acerca de cómo deseamos
reaccionar a ese evento.
Los niños son
especialistas en aceptar. Puede ser que nos hagan un berrinche cuando les
decimos que tienen que bañarse, pero una vez que están dentro de la ducha, se
divierten montones, y resulta que luego no quieren salirse.
Plantéate hoy la
posibilidad de aceptar de buena gana lo que suceda en tu día. Te darás cuenta
de que cada pequeña cosa puede ser recibida con la visión de aprender de ella,
de usarla para crecer, para mejorar. Te sentirás mucho mejor casi de inmediato.
“Cuando tomas la decisión de aceptar, te das cuenta de que es
una actitud sanadora para muchos aspectos de tu vida. Te permite un espacio de
reflexión e introspección, y te da una nueva perspectiva. La vida no es buena o
mala, depende de nuestra actitud el convertir cada cosa que nos sucede en un
drama, o en una oportunidad de crecer y cambiar. La aceptación no es sinónimo
de resignación, todo lo contrario”.
4 comentarios:
Excelente, tienes toda la razón, nada más aceptando que tienes un problema, es como puedes ver algunas posibles soluciones y de no tener solución ver como sobrellevar las cosas...Exitos
Muchas gracias por tu comentario y tu feedback. Saludos.
El aceptar es algo que trato de incorporar en mi vida y todos los días aprendo mas y mas pq relaja y te ayuda para aceptar que uno no puede controlar todo. Bello post! Me encantó
Asi es Mila...la verdad es que para mi ha sido un descubrimiento saber la liberacion que significa aceptar lo que no podemos cambiar. Ahora por ejemplo tengo un gripón, hace unos meses me hubiera estado arrastrando por los pasillos, quejandome y sintiendome miserable. Ahora estoy tomandome un tecito, y haciendo reorganizacion de agenda, para poder descansar. Cero rebeldía contra la gripe...solo dejarla ir.
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